Es muy sencillo pero ayuda mucho a distinguir entre esos pensamientos intrusivos que no nos favorecen nada y transformarlos en pensamientos que nos impulsen y motiven.
-¿De qué estáis hablando?
+Te explicamos…
Los pensamientos calientes son guiados por la impulsividad y la parte emocional.
Por ejemplo las corazonadas o acciones muy pasionales. A veces pueden ser negativos hacia las posibilidades que se percibe de unx mismx.
Los pensamientos fríos son guiados por la reflexión, serenidad, por la parte más racional y estratégica.
Por ejemplo las decisiones tomadas desde el autocontrol. Ayudan a ver la situación con más realismo y positividad.
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